Cuando hablamos de los pongos nos estamos refiriendo a esos objetos completamente inservibles que ni siquiera sabemos dónde colocar, de ahí su nombre; y esto, ¿dónde lo pongo?
Pueden ser tan variados como puedas imaginar, de todas las formas, colores y tamaños, pero todos ellos sin ningún uso aparente y, además, por normal general, estéticamente bastante dañinos a la vista. Sin embargo, por alguna extraña razón, no has sido capaz de deshacerte de ese objeto al cual no encuentras uso ni lugar y lleva años dando tumbos por algún rincón de tu casa.
¿No crees que ya es hora de prescindir de esos regalos de aniversario poco acertados, de aquello que, en realidad, no usas ni es de tu agrado?
3 sencillos pasos para deshacerse de cosas materiales innecesarias
Primer paso: En primer lugar, es preciso localizar aquellos objetos que guardamos sin razón alguna. Un pongo es algo que tenemos en nuestra propiedad, pero en realidad no va para nada con nosotros; un objeto que siempre está de acá para allá porque no le encuentras su función ni su lugar; o que, directamente, has guardado en el cajón más escondido de tu casa para que nadie pueda verlo, ni siquiera tú.
Segundo: Ahora que esos objetos están localizados, hay que vencer ese miedo absurdo que suelen tener la mayoría de los mortales a deshacerse de regalos que, en el momento de recibirlos, les dejaron cara de póker. Así como hablamos de objetos, también nos referimos a deshacerse de esa ropa que llevas años sin ponerte.
Tercero: Deja de mirar esos pongos con la nostalgia. Los recuerdos no habitan en un objeto o en una prenda de ropa inservible que, además, no es de tu agrado. Ponte una fecha para deshacerte de productos que ya no usas, jamás has usado y que no sabes ni dónde poner.
¡Deshazte de los pongos y experimenta la sensación de ligereza, alivio e, incluso, paz!
